Dentro de los pequeños mamíferos, el hámster es una de las apuestas más seguras en cuanto a ventas. Por ello, debemos conocer algunos datos sobre su mantenimiento.
El hámster que más habitualmente se comercializa es el dorado de Siria, pero existen un grupo de llamados hámsteres enanos también muy populares: el Roborovski, el enano chino, el ruso y el de Campbell. Veamos algunas pinceladas sobre el mantenimiento de estas mascotas.
Hábitat
Un hámster se puede mantener tanto en una jaula como en un tanque de cristal. Si el propietario elige una jaula, la distancia entre barrotes variará en función del tamaño de la especie. Además, a algunos hámsteres, como el dorado, les encanta trepar, por lo que una jaula es más adecuada. Si se opta por un terrario, debe acondicionarse adecuadamente y asegurarse de que está bien ventilado. Los hámsteres enanos, a pesar de su menor tamaño, necesitan hábitats mayores que sus parientes, ya que son muy activos, corren y excavan mucho, pero se encuentran incómodos si se les saca de su jaula durante mucho tiempo para que hagan ejercicio.
Necesitarán también un sustrato adecuado. La arena para gatos (sepiolita) no debería utilizarse por varios motivos: estas especies tienen la costumbre de escarbar en busca de comida, lo que implica que se desprenda polvo que puede provocar alteraciones respiratorias; además, como es un material absorbente, el propietario no puede controlar si el animal hace sus necesidades correctamente y se pueden pasar por alto alteraciones gastrointestinales; finalmente, si el animal ingiere sepiolita, corre el riesgo de que se produzca una obstrucción intestinal y tenga que pasar por el quirófano.
En el hábitat debe haber un comedero (aunque tienen tendencia a sacar los alimentos de los recipientes) y un bebedero de tubo (para impedir que el agua se ensucie).
Son animales que precisan accesorios para hacer ejercicio, por lo que los túneles, escaleras y ruedas son ideales. También necesitarán material para hacer su nido. Algunos hámsteres no sólo disfrutan con los baños de arena, sino que les sirve como método para limpiar su pelaje y evitar que se acumule grasa en él. La arena para chinchillas es perfecta para estos baños.
Es fundamental mantener su hábitat en perfectas condiciones de higiene para evitar no sólo malos olores sino para garantizar el bienestar del animal, ya de por sí muy limpio.
Alimentación del hámster
El mercado ofrece diversos formatos de alimentos para hámsteres, desde mezclas de semillas hasta piensos extrusionados. Sea cual sea la elección del propietario, éste deberá complementar la dieta comercial con frutas y verduras frescas, que deberán retirarse si el animal las rechaza para evitar que fermenten en la jaula. Cualquier producto vegetal debe darse a temperatura ambiente tras lavarse y secarse bien. Ocasionalmente se les debe proporcionar algún pedacito de carne, pienso de perro o queso, ya que son animales omnívoros.
Hámsteres y niños
Tradicionalmente, el hámster ha sido la primera mascota de muchas personas y sigue viéndose, por su mantenimiento en principio sencillo, como el amigo animal perfecto para cualquier niño. Sin embargo, esto no quiere decir que todo sea tan simple.
El adulto que adquiere el animal debe ser consciente de que deberá dar unas pautas al niño por el bien del animal y también por el bien de una relación que puede ser beneficiosa para ambos. El niño debe entender, por ejemplo, que es un animal de hábitos nocturnos, y que por tanto interrumpir constantemente su sueño de día para cogerlo y acariciarlo no es saludable para la mascota. También debe entender que el animal requerirá su espacio y que en ocasiones necesitará soledad.
Establecer unas sencillas normas de comportamiento para el cuidado del hámster por parte del niño y plasmarlas en un folleto o pequeño cartel con llamativos dibujos y frases cortas puede resultar de gran utilidad al adulto. Cualquier ayuda para educar a un niño es bienvenida.
Conoce algunas necesidades básicas del hámster Clic para tuitearEl hámster: información básica
- Su esperanza de vida es en torno a 1,5-3 años.
- Un problema frecuente en los hámsteres es el sobrecrecimiento de los dientes, por lo que es preciso que el propietario lo revise periódicamente y le proporcione material para roer.
- Poseen unas bolsas en la parte interior de las mejillas donde almacenan temporalmente el alimento.
- La jaula debe colocarse en una zona tranquila de la casa y alejada de corrientes de aire y de altas temperaturas, ya que pueden padecer problemas respiratorios y sufrir golpes de calor.
- Suelen ser muy mansos pero a veces pueden morder. Por eso, es muy importante saber cómo cogerlos y cuándo.