Cataluña y Galicia son las únicas comunidades autónomas en las que la vacunación contra la rabia de perros, gatos y hurones no es obligatoria. Esta situación ha sido objeto de una larga solicitud por parte del Consejo de Colegios Veterinarios de Cataluña (CCVC). Esta petición se alinea con el desafío global de la OMS, la FAO, la OIE y la Alianza Global para el Control de la Rabia, que buscan eliminar todas las muertes de personas por rabia transmitida a través de mordeduras de perro para 2030. A pesar de que la Generalitat anunció en septiembre de 2022 que estaba trabajando en un proyecto de decreto para establecer la vacunación antirrábica obligatoria, después de dieciséis meses, dicho decreto aún no se ha materializado.
La rabia, considerada una amenaza global, afecta el sistema nervioso y es prácticamente mortal una vez que aparecen los síntomas clínicos. Aunque en Cataluña no se han detectado casos en las últimas décadas, regiones cercanas, como Melilla, han registrado 131 casos de rabia en animales desde 1983, principalmente en perros. Los veterinarios catalanes señalan que, dada la globalización y la ruta marítima regular desde Argelia, donde la rabia está presente, hasta Alicante, la enfermedad sigue siendo una amenaza para Cataluña.
Compromisos y desafíos en la lucha global
Con el objetivo de conocer el estado del proyecto y abogar por su finalización y aprobación este año, una representación del CCVC liderada por su presidenta, Verónica Araunabeña, se reunió el 24 de enero con David Mascort, conseller del Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural de la Generalitat.
Durante la reunión, el conseller Mascort se comprometió a tener listo el decreto en 2024, y actualmente, el proyecto de decreto está en trámite de información pública hasta el 19 de febrero. “Estamos muy satisfechos con el resultado de la reunión; como Consejo, nos comprometemos a hacer seguimiento del proyecto de decreto y ponemos a disposición de la Generalitat nuestra estructura para facilitar su despliegue”, afirmó Araunabeña. Esta demanda de los veterinarios tiene raíces históricas.
En la reunión con el conseller Mascort también estuvo presente la directora general de Agricultura y Ganadería, Elisenda Guillaumes. Por parte del Consejo, además de Araunabeña, participaron el vicepresidente del CCVC, Ramon Cedó; el secretario, Miquel Molins; el vocal por Barcelona, Joan Mesià, y la responsable de la gestión técnica del CCVC, Anna Vilà.