Acuario para principiantes: algunos consejos

Un nuevo cliente entra en nuestro comercio con la idea de iniciarse en el mundo de la acuariofilia. ¿Cómo debe ser un acuario para principiantes? ¿Cuáles son los conceptos básicos que habrá que dejarle claros desde el principio?

Diego A. Bertot

La prisa es la peor enemiga del acuarismo. Lo primero que tenemos que hacer ante un nuevo cliente es inculcarle que debe tener paciencia. No hay nada peor que ver a un acuarista irse de una tienda con el kit compuesto por un acuario, grava, calefactor y demás aparatos, un bote de comida y una bolsa con peces. Lo más probable es que en pocos días regrese para reponer los peces que seguramente se le morirán.

Lamentablemente si esos peces se le vuelven a morir lo más probable es que el acuario y todo lo que compró vayan a parar al cuarto de los trastos, y esa persona será una más de los tantos que alimentan el mito de que el acuarismo es un arte muy difícil sólo reservado a expertos.

Es muy importante informar a un principiante de que el acuario es un sistema vivo que para funcionar correctamente debe madurar previamente a la introducción de los animales, a pesar de su impaciencia.

Un ambiente saludable

No es ningún secreto que ofrecer un correcto ambiente a los peces es la clave del triunfo como acuarista. Si no se les proporciona, seguramente se debilitarán haciéndose más vulnerables al ataque de enfermedades. Por lo general, es muy probable que un pez enfermo corra la peor de las suertes, pues las herramientas necesarias para el correcto diagnóstico y tratamiento de las enfermedades no están al alcance del acuarista promedio, por lo que la prevención tiene una importancia fundamental.

Cambios semanales de agua

Al ser un sistema cerrado, todo lo que entra al acuario permanece allí hasta que se transforma o es retirado. Los desechos que se van acumulando producto del metabolismo de los peces tienen tres formas de desaparecer:

1. Son utilizados por las plantas como nutrientes.
2. Son transformados en compuestos menos tóxicos, como ocurre con los nitritos transformándose en nitratos por acción de las bacterias nitrificantes en el filtro.
3. Cambios parciales de agua. Este último punto es muy importante porque haciendo cambios parciales de agua diluiremos los compuestos de desecho impidiendo que alcancen concentraciones tóxicas para los peces. Además, recordemos que no todos los productos de desecho que producen los peces son aprovechados por las plantas por lo que estos cambios son la única manera de retirarlos.

La periodicidad de estos cambios estará dada por la carga biológica del acuario, o sea, cuanto mayor sea ésta menor será la periodicidad de los cambios de agua, pero no debería exceder de los 15 días, ni ser de menos del 30 % del volumen.

Es preciso recordar al nuevo cliente que el agua que añada en el reemplazo deberá ser lo más cercana posible a las condiciones del acuario en términos de pH, temperatura y dureza. El agua corriente contiene cloro o cloramina, por lo que su neutralización por medio de los productos adecuados disponibles en nuestras tiendas será lo más adecuado.

Vale la pena destacar que si bien los cambios periódicos de agua son estrictamente necesarios, no se debe llegar al extremo de realizar cambios totales de agua, pues el efecto será el inverso al deseado.

Adecuada filtración en el acuario para principiantes

Existe una gran variedad de equipos de filtración cuya utilización hace más fácil el mantenimiento de la calidad del agua. Será nuestra función como profesionales asesorar concienzudamente al principiante sobre cuál es el equipo que mejor se adapta a sus necesidades de acuerdo al acuario que pretenda instalar, de manera que asegure el mantenimiento de la buena calidad del agua.

Un filtro sucio trabaja menos eficientemente, provocando el aumento de nitritos y amoniaco, que a su vez llevará a la muerte de los peces. Es por ello que deberemos asesorar sobre la manera, la periodicidad y la forma de mantener esos equipos. Una regla que yo personalmente aplico es la de limpiar el filtro el primer fin de semana después de cada cambio de estación. Obviamente esta regla no es única y cada acuarista tendrá la suya. Lo importante es inculcarle al principiante que debe mantener periódicamente el filtro, y que esa limpieza debe hacerse en un balde con agua extraída del acuario a fin de proteger las bacterias del filtro.

Aclimatación y cuarentena

Los cambios bruscos en las condiciones del medio son casi siempre fatales para nuestros peces. Por ello es de suma importancia que insistamos para que el aficionado aclimate los peces que adquiere tratando de que las condiciones del agua de la bolsa de transporte se igualen a las de su acuario. La mejor manera para lograrlo será colocarlos en un contenedor aparte (puede ser un acuario pequeño o un recipiente plástico limpio y sin restos de productos químicos) e ir añadiéndole cada 10 minutos agua del acuario hasta que el recipiente esté totalmente lleno. Luego se procederá a trasladar a los peces al nuevo acuario, teniendo mucho cuidado de no incorporar el agua del acuario de venta.

Otro punto importante, pero que en pocas ocasiones se lleva a la práctica, es el de la cuarentena. Muchas veces los peces están en los acuarios de venta sin síntomas aparentes de enfermedad, pero el estrés que implica el traslado al nuevo hábitat provoca que un trastorno latente se manifieste.

Por ello, siempre hay que recomendarle al aficionado que tenga un acuario de cuarentena donde colocar los peces que vaya adquiriendo. Así, en caso de que se manifieste alguna enfermedad, no se transmitirá al acuario principal y podrá ser tratada en el de cuarentena.

El lapso mínimo recomendable para realizar una cuarentena correcta es de dos a tres semanas. El acuario de cuarentena deberá tener al menos 50 litros y estar completamente equipado con su sistema de aireación, filtro y calefactor y desprovisto de sustrato. Tendrá a lo sumo una pequeña maceta volcada que sirva de escondite para los peces que así lo requieran. Salvo que se descubran síntomas de enfermedad, no debe medicarse este acuario.

 

 

En un acuario para principiantes, simplifica las cosas

En el momento de vender los peces siempre debemos aconsejar al principiante que se adapten a las condiciones del agua corriente de la que dispone. Así, si el agua es de pozo, casi siempre dura y alcalina, lo más aconsejable será que comience por peces que se adapten mejor a esas condiciones: iniciarse con peces amazónicos en ese caso sólo complicaría las cosas.

Lo contrario ocurre si el agua que tiene disponible es blanda: en ese caso los peces amazónicos serán la mejor opción. De todas manera, si el agua se encuentra dentro del rango de pH de 6.5-7.5, estará bien para la gran mayoría de las especies disponibles en el comercio, sobre todo si provienen de criaderos.

También es conveniente que el aficionado se inicie en el acuarismo con peces poco exigentes y a medida que avance en la afición y adquiera experiencia mantenga especies más complejas.

No sobrealimentar

Muchos principiantes no saben cómo alimentar a sus peces y frecuentemente es culpa de un mal asesoramiento. Recordemos que el exceso de alimento no consumido degradará las condiciones del acuario, por lo que se debe proporcionar lo que los peces puedan consumir en dos o tres minutos. Es recomendable dividir las tomas en varias dosis diarias, tres si es posible. Procediendo de esta manera minimizaremos el alimento no aprovechado. Si los horarios del aficionado no permiten dividir la alimentación en varias dosis, los comederos automáticos de marcas reconocidas siempre son una buena opción.

Evitar la superpoblación

Colocar más peces en el acuario de los que su volumen permite, provocará que se estresen y por ende que su sistema inmune se debilite abriendo la puerta de entrada a las enfermedades. Recordemos que en el momento de calcular si un acuario estará o no superpoblado tenemos que considerar el tamaño adulto de los peces.

No hay una regla infalible en el momento de determinar si un acuario está superpoblado o no. Una muy difundida establece que a cada pez le corresponderá un litro de agua por cada centímetro de su cuerpo en edad adulta sin contar la aleta caudal. Sin embargo, al aplicar esta regla encontramos que cinco neones adultos necesitarían el equivalente a un disco, lo cual teniendo en cuenta las masas corporales de unos y otros no suena lógico.

Lo mejor para determinar la población de un acuario es lógicamente aplicar el sentido común, estudiando las características y hábitos de las especies que se incorporarán al acuario. Es en este punto donde el aficionado más necesitará de nuestra guía.

Colocar especies compatibles

Es importante que aconsejemos a nuestros clientes sobre la compatibilidad de los peces que nos están comprando. Además es bueno que le consultemos sobre las especies que ya mantiene en su acuario (si es que ya tiene alguna) y advertirle en el caso de que observemos alguna incompatibilidad en lo que a comportamiento o  requerimientos se refiere.