Un acuario habitado por peces disco, como vimos en la primera parte del artículo, es un buen reclamo para el aficionado. En él se describen los tres pilares para el éxito de su mantenimiento, ahora el autor describe cómo cuidar el diseño y a sus habitantes.
Ezequiel P. Salguero, CEO de Pzes.es
Imagen cedida por el autor
El tamaño importa
Recordemos que el tamaño en una urna de peces disco es muy importante. Siempre intentamos recomendar como mínimo unos 50 o 60 litros por pez, por lo que un acuario de iniciación para este objetivo serían unos 250 litros. Todo lo que esté por debajo de ese volumen de agua va a generar desequilibrios, problemas de adaptación y, sobre todo, posibles enfermedades en los peces.
Cuidar el diseño y los habitantes
Para favorecer el éxito debemos plantear un diseño de madera y roca natural, que sea equilibrado, sencillo y fácil de mantener; pero sobre todo que ayude a un rápido mantenimiento, ya que se recomienda realizar frecuentes cambios de agua en este tipo de acuarios. Se recomienda siempre como mínimo un cambio de agua semanal de al menos un 30 % o 40 %. Este cambio de agua es vital:
• Refresca.
• Regenera.
• Elimina toxinas.
• Ayuda a equilibrar valores de agua.
• Ayuda a mantener el sistema vivo y estable.
Tan importantes como los peces disco son los compañeros con los que convivirán en este tipo de acuario: peces pequeños y pacíficos, acordes a los valores del agua que tenemos y que respeten el plantado. La familia de los tetras es, por ejemplo, una excelente opción. Sin embargo, no debemos olvidarlos del denominado “equipo de limpieza”, indispensables para facilitarnos el mantenimiento, eliminando algas y restos de comida. Caracoles, gambas, corydoras o ancistrus son algunos que convivirán de forma segura y eficaz con los discos sin dañar las plantas.
Su alimentación estará basada en un pienso de calidad, en granulado (la escama es menos recomendable), para evitar ensuciar demasiado y se deberá combinar con alimento congelado tipo artemia, larva o papilla. Hay excelentes papillas comerciales con buen margen de venta que nos ayudan en la fidelización del cliente.
En lo que se refiere al abonado de las plantas, este dependerá del montaje realizado y de los requerimientos específicos de cada especie. Las marcas punteras del mercado nos ayudarán a elegir y recomendar los acondicionadores y abonos más adecuados para el correcto equilibrio de nutrientes del acuario.
En conclusión
Hay que quitarse el miedo a ofrecer un acuario plantado con peces disco. Va a aportar nuevas oportunidades de negocio, márgenes comerciales altos y, sobre todo, compras recurrentes.
Es una manera de fidelizar al cliente y ayudarle a evolucionar en esta afición por la que todos apostamos. Además, se puede optar por un tipo de acuario también muy interesante: un biotopo estrictamente amazónico de peces discos; pero eso es otro tema.
Artículo completo publicado en Especiespro Nº 250 (diciembre).