Los comerciantes tienen a veces que enfrentarse a las reticencias de los clientes para montar un acuario, debido a algunas supersticiones e ideas preconcebidas.
Luis Ibarra
Asociación Acuariófila Sevillana
Muchos clientes, cuando se acercan a nuestra tienda y se les ofrece la posibilidad de montar un acuario, nos dicen que estos traen mala suerte. Esta mentalidad es consecuencia de unos mitos o supersticiones completamente infundados. Hay que tratar de erradicar estas ideas, e invitarles a que conozcan y disfruten de este maravilloso hobby, asegurándoles que no se arrepentirán de ello.
Historias imaginarias
La palabra “mito” proviene del vocablo griego mythos, comúnmente interpretado como narración, relato, ficción, fábula, leyenda, invención, utopía, fantasía, superstición, mitología, y corresponde a una historia imaginaria que altera las verdaderas cualidades de una persona o de una cosa y les da más valor del que tienen en realidad. Su origen se encuentra en una explicación de los fenómenos naturales. A su vez, suele sugerir un tiempo fabuloso y lleno de encanto, pero también ingenuo y sometido a creencias erróneas, propias de civilizaciones primitivas que se caracterizan por la existencia de formas de pensamiento inferiores al conocimiento científico y que sin duda alguna han sido heredadas de generación en generación.
Veamos cinco mitos o relatos de nuestra historia respecto de si los peces traen o no mala suerte. Algunos de ellos tienen su origen en la transmisión oral y fueron escritos posteriormente, y muchos de ellos tienen varias versiones.
Cristianos
Se dice que este mito no tiene nada que ver con los peces y que viene desde hace siglos. La tradición apunta a que esa mala suerte era atribuible a los cristianos desde la época romana. Para diferenciar a los cristianos de los no cristianos se les tatuaba un pez en el brazo, de manera que estaban bien marcados y eran identificables. Por tanto y con justa razón la creencia “los peces traen mala suerte” era justificada, ya que quien tuviera un pez tatuado en el brazo se arriesgaba a ser capturado y arrojado a los leones.
Feng Shui
La idea de que los peces traen mala suerte se dice también que procede de la ancestral cultura china Feng Shui, que busca mejorar la vida estudiando los cambios que ocurren en la naturaleza. En ella se dice que el agua es beneficiosa para equilibrar la energía del hogar, y por eso la califica de símbolo de prosperidad y positivismo si se mantiene limpia y en equilibrio. A su vez, dice que hay sectores de las habitaciones, casas u oficinas, en los que existe una energía favorable que necesita del elemento agua para activarse y lograr armonía. Sin embargo, lo que sí atrae negativismo e impresiones desagradables es encontrar un acuario sucio y descuidado; por esas sensaciones se supone que se les relaciona con el tema de las malas vibraciones.
Concursos
También se dice que antiguamente los chinos tenían concursos de peces ornamentales, y que aquellos chinos de grandes fortunas nunca podían ganar estos concursos, porque quienes se llevaban siempre los honores eran los orientales pobres y humildes que criaban a sus peces en charcas en el campo. Y estos asiáticos envidiosos hicieron creer a los humildes acuariófilos que la causa de su pobreza residía en los peces que ellos criaban con tanto esmero, para de esa manera evitar que siguieran participando y ser ellos quienes se llevaran los premios.
Bola de cristal
De la misma manera esta superstición se atribuye a la semejanza existente entre las bolas de cristal que utilizan las pitonisas y las brujas con las peceras de cristal utilizadas para mantener los peces de colores, hoy en día casi en desuso, debido a su reducido espacio y a sus pocas condiciones para mantener seres vivos.
Incendios
Como último y más reciente mito, se considera que antiguamente las instalaciones eléctricas de las casas no cumplían los requisitos mínimos de seguridad y menos aquellas viejas bombas de aire que utilizaban nuestros bisabuelos para oxigenar el acuario. Esas bombas de ruido fastidioso se calentaban demasiado y generaban cortes eléctricos, produciéndose muchas veces hasta grandes incendios.
Paz interior
Como veis, hasta ahora solo se habla de creencias y de mitos, y no hay ningún motivo concreto y demostrable por el cual unos peces deban traer buena o mala suerte.
Por otra parte, es innegable que, más que mala suerte, lo que trae un acuario es la paz interior, ya que aporta armonía a un espacio estético, permite distraer la mente y relajar los pensamientos, observando el movimiento de los peces y del agua, junto con el conjunto visual que forman con las plantas, que es algo muy relajante.