Vuelta a la rutina sin estrés posvacacional, también para las mascotas

Aquí van algunos consejos para que vuestros clientes superen junto a sus mascotas el estrés posvacacional que supone la vuelta al trabajo tras el verano.

El retorno de las vacaciones nunca es fácil, y para los animales de compañía tampoco. Después de pasar juntos el verano, la vuelta a la rutina también tiene consecuencias para ellos, que también  sufren el conocido estrés posvacacional. Kiwoko, la mayor cadena de tiendas de animales de España, ofrece algunos consejos para superar la vuelta a casa y que los propietarios sigan disfrutando del día a día juntos.

Durante las vacaciones las mascotas pierden hábitos y rutinas establecidas, ya que se suele pasar más tiempo de lo normal junto a ellos, proporcionándoles más cariño y horas de juego. Por eso es normal que, a la vuelta, sientan un malestar que puede llegar a provocar cambios en su comportamiento habitual.

Si un perro ladra más de lo normal a la vuelta de vacaciones puede significar que echan de menos la compañía de su amo y sufren un principio de estrés postvacacional. En el caso de los cat lovers, si se ha dejado con alguien, la vuelta a casa puede suponer ansiedad por separación, y uno de los indicios suele ser que deje de utilizar el arenero.

Si el perro o gato empieza a tener comportamientos distintos como, por ejemplo, hacer sus necesidades donde no debe, escarbar en la basura o mordisquear muebles y zapatos, puede ser sinónimo de que no está recibiendo la atención y el ejercicio que necesita.

Cómo puede un propietario superar el estrés vacacional de su mascota Clic para tuitear

Si le cuesta salir a pasear o comer, al igual que los seres humanos, las mascotas necesitan tiempo y disciplina para volver a la rutina. Por eso hay que tener paciencia y estar al lado del animal para que poco a poco todo vuelva a la normalidad.

Ocupadas y distraidas

Para afrontar con buen pie la vuelta de las vacaciones Kiwoko recomienda mantener a las mascotas ocupadas y estimularlas con paseos y actividades que puedan suplir las largas horas que el propietario pasa fuera de casa. Dejar siempre cerca sus juguetes preferidos puede ser otra buena opción para evitar el aburrimiento. Y, finalmente, también debe recuperarse la normalidad en cuanto a la alimentación pues, al igual que los humanos, ellos también cometen excesos en verano. Por eso es muy importante volver a recuperar los hábitos alimenticios de siempre y velar por su salud. De esta forma un propietario podrá volver a disfrutar de los mejores momentos juntos, también en septiembre.