Cada 17 de febrero se celebran el Día Mundial de los Gatos. Si te gusta interactuar con ellos, conoces de primera mano lo especiales que son los felinos. Purina ha elaborado, junto con sus expertos veterinarios, una serie de actividades fáciles y sencillas para que los propietarios puedan celebrar juntos su día y fortalezcan ese vínculo tan especial.
En primer lugar, hay que mencionar que, a pesar de que erróneamente se considera que los gatos son animales poco cariñosos, no es cierto. Los gatos, a diferencia de los perros, se caracterizan por ser de carácter independiente pero también por su autenticidad y tener una personalidad única, pero esto no los hace menos amigables. Quienes conviven con gatos disfrutan de un lazo muy estrecho y genuino. Tal es así que jugar con ellos es indispensable para estimular su inteligencia y para reforzar el vínculo entre animal y humano. Además le aporta un buen estímulo físico y mental.
Forjar una relación amena con el gato fomenta una convivencia amistosa en casa. En el caso de los gatos de interior, es especialmente importante que utilicen la misma energía que gastarían si, por ejemplo, estuvieran patrullando por su territorio y cazando una presa.
Por otro lado, debemos tener en cuenta que los juegos deben hacerse de la forma más cuidadosa posible, ya que hay objetos que pueden lastimarla. Además, la edad es muy importante. Por ejemplo, si el gatito es pequeño, cualquier estímulo captará su interés, mientras que, si es mayor, hay que buscar nuevas formas de entretenerlo para mantener su atención. Se trata de encontrar un punto intermedio en donde su independencia no se vea ofuscada por jugar con su cuidador.
Se recomienda organizar al menos dos buenas sesiones de juego al día. Para los gatos jóvenes de interior, debería estimularse su comportamiento predador hasta 30 veces al día para que sacien su instinto cazador. Esta frecuencia puede ser menor si conviven varios gatos y les gusta perseguirse y jugar juntos o si el gato empieza a tener una edad más avanzada y es menos activo.
1. Jugar con la comida
Los comederos tipo rompecabezas y las bolas dispensadoras de comida son juguetes interactivos que incorporan el alimento del gato en un compartimento interior. Al rodar o saltar sobre el juguete, el gato hará que salga la comida. El uso de un comedero tipo rompecabezas estimula su deseo de caza y le hará esforzarse para conseguir el alimento. El cliente puede elegir colocar en el juguete su pienso o algún snack que le guste al gato, pero recuérdale que tenga en cuenta la cantidad de comida que introduce a la hora de calcular la ingesta diaria.
2. Perseguir a la presa
Para esto hay juguetes que simulan el movimiento de la presa. Se puede arrastrar un juguete por el suelo con una cuerda, deteniéndose a cada rato como lo haría un animal, así se anima al gato a acechar y a saltar como lo haría en la naturaleza. Esto aumentará su velocidad y agilidad y estimulará sus instintos de caza. Recomienda mantener el juguete escondido hasta la hora de jugar para que el gato se interese por ella novedad.
3. Correr y buscar
Aunque parezca mentira, a muchos gatos les gusta jugar a perseguir o, al menos, a perseguir y atrapar una pelota. Los juguetes con pelota simulan los movimientos rápidos e inesperados de la presa. Colocar una campanilla dentro llamará la atención del gato. El propietario puede tirarla o hacerla rodar para que pueda verla y perseguirla. Algunos gatos responden particularmente bien cuando se rueda o se lanza la pelota a otra habitación o hacia una esquina.
4. A la rica hierba gatera
Rellenar de hierba gatera, una hierba natural, un juguete o una pelota (o comprar una que ya la lleve dentro) estimula el interés del gato por un juguete. Sin embargo, no a todos los gatos les gusta la hierba gatera.
5. Sorprenderlo
Los gatos son naturalmente atléticos y ágiles, si se juega seguido con él sus impulsos naturales de caza y actividad estarán satisfechos. Aconseja a cliente que se divierta y mantenga a su gato siempre alerta con juegos. Recuérdales que el juego no debe ser una obligación, deben respetar la independencia del gato y, sobre todo, ¡divertise juntos!
