La pregunta surge porque parece que la extinción de algunas especies de piojos ha sido inducida por los métodos utilizados para la conservación de aves amenazadas a las que previamente parasitaban.
El Dr. David Waugh, autor del artículo publicado en EspeciesPro abril, es corresponsal de Loro Parque Fundación (LPF). En él explica cómo LPF está trabajando para mejorar las perspectivas de las psitácidas amenazadas por la destrucción del hábitat y la caza furtiva de nidos. La conservación de sus piojos es consecuencia pasiva de las acciones tomadas.
¿Debemos preocuparnos?
Los parásitos dan miedo a la mayoría de las personas, principalmente porque la idea de lo que hacen es inquietante. Si se ven (la mayoría intentan permanecer ocultos), su apariencia genera disgusto (figuras 1 y 2). Grupos importantes con formas ectoparasíticas incluyen órdenes de insectos de pulgas (Siphonaptera), hemípteros o chinches (Hemiptera) y moscas (Diptera), así como familias de sanguijuelas, ácaros y garrapatas (Acari).
Estos ectoparásitos son potentes agentes de selección en las aves, con efectos negativos en el tamaño de la puesta, el crecimiento y la supervivencia de los pichones, el comportamiento de los padres, la dispersión de las crías, el éxito futuro de la reproducción y la supervivencia del huésped.
Defensa natural
Dado el peligro, no es sorprendente que las aves silvestres hayan desarrollado una amplia variedad de defensas para controlar los ectoparásitos, analizadas exhaustivamente por Clayton et al. (2010) y algunos de los cuales se mencionan en este artículo.
- Lo más sencillo es que las aves pueden eliminar parásitos si están adheridas a plumas que están mudadas. Mientras se acicala, el pico del ave puede desplazar físicamente a los parásitos. Al mismo tiempo puede untar el plumaje con el aceite de la glándula uropígea para reducir la carga del parásito.
- Rascarse con las patas también puede actuar para desalojar a los parásitos.
- Se sugiere que tanto el baño de agua como el de polvo controlan el nivel de parásitos. Este último tiene un efecto abrasivo y posiblemente sofocante, ya que la tierra fina o la arena se filtran a través del plumaje.
- Se piensa que los rayos solares controlan los ectoparásitos: matándolos directamente o incrementando su vulnerabilidad al acicalamiento mientras intentan escapar del calor.
- Algunas aves se untan con materiales cargados de aromas. El ejemplo más observado es el comportamiento de “anting”: las aves aplastan y frotan las hormigas en sus plumas (anting activo) o permiten que las hormigas se arrastren a través del plumaje (anting pasivo). Las aves utilizan exclusivamente hormigas que secretan ácido fórmico u otros fluidos picantes. Esto sugiere que el “anting” puede matar o disuadir a los ectoparásitos.
- Existen tipos de comportamientos de mantenimiento de nidos que pueden disuadir ectoparásitos, como:
- la territorialidad y el anidamiento en colonias más pequeñas,
- evitar el uso de nidos donde hayan ectoparásitos,
- saneamiento de nidos utilizados anteriormente mediante la eliminación de sustratos viejos en los nidos,
- fumigación de nidos mediante la adición de vegetación aromática y,
- si todo lo demás falla, el abandono del nido en los casos en que los pichones puedan estar en peligro de muerte.
¿Qué hacer con el tema de las acciones de conservación que causan la extinción de algunas especies de piojos?
Durante el programa de reproducción en cautiverio y liberación para salvar al cóndor de California (Gymnogyps californianus), el piojo Colpocephalum californici, que era específico de este huésped en peligro crítico, se extinguió. Probablemente fue resultado de las rutinas veterinarias de desparasitación (Rózsa y Vas, 2015). En 1987, el último de los seis individuos silvestres fue capturado para unirse a un programa de reproducción y liberación en cautiverio. La reproducción en la naturaleza se reanudó en 2002, y la población silvestre total es actualmente de 231 individuos (BirdLife International, 2019).
Por lo tanto, parece que el cóndor de California es capaz de sobrevivir sin su piojo, lo que sugiere que las especies de psitácidas en peligro crítico también podrían sobrevivir en una condición sin piojos.
Sin embargo, si los piojos ejercen presiones selectivas para aumentar la diversidad del huésped, solo con el tiempo se proporcionará la evidencia, y mientras podría ser prudente que las psitácidas salvajes se queden con sus piojos.
Accede al artículo completo publicado en el número EspeciesPro 234.
Referencias
BirdLife International. (2019) Species factsheet: Gymnogyps californianus. Downloaded from http://www.birdlife.org on 17/05/2019.
Clayton, D.H., Koop, J.A.H., Harbison, C.W., Moyer, B.R. and S.E. Bush. (2010) How Birds Combat Ectoparasites. The Open Ornithology Journal 3:41-71
Fish and Wildlife Service. (2014) Endangered and Threatened Wildlife and Plants; Three Foreign Parrot Species. Federal Register 79 (121): 35870-35900
Price, R. D., Hellenthal, R. A. and R. L. Palma. (2003) World checklist of chewing lice with host associations and keys to families and genera. Pages 1-448 in Price, R. D., Hellenthal, R. A., Palma, R. L., Johnson, K. P. and D. H. Clayton. The chewing lice: world checklist and biological overview. Illinois Natural History Survey Special Publication 24. x + 501 pp.
Rózsa, L. and Z. Vas. (2015) Co-extinct and critically co-endangered species of parasitic lice, and conservation-induced extinction: should lice be reintroduced to their hosts? Oryx 49 (1): 107-110.